"Brinda con salud, no con alcohol"
Cada año, millones de personas pierden la vida debido a problemas de salud relacionados con esta sustancia, que se vincula a más de 200 enfermedades y trastornos, como cirrosis hepática, cáncer, problemas cardiovasculares y daños neurológicos.
Además de los efectos en la salud, el alcohol tiene un fuerte impacto social. Es una de las principales causas de accidentes de tráfico, conflictos familiares y violencia, y representa un riesgo severo durante el embarazo, pudiendo provocar el síndrome alcohólico fetal.
La mejor prevención es la moderación, o bien, la abstinencia. Para aquellos que desean reducir o eliminar su consumo, existen numerosos programas de apoyo, como grupos de ayuda y terapias individuales o familiares, que ofrecen herramientas para afrontar este proceso.
En este Día Mundial sin Alcohol, se invita a todas las personas a reflexionar sobre sus propios hábitos de consumo y a considerar alternativas más saludables. Es posible, a través de la información y el compromiso, transformar el estilo de vida y reducir el impacto del alcohol en la sociedad.